
Cobertura por Diana H.Gómez (texto) & Elizabeth Díaz (foto)
San Bartolo Coyotepec, Oaxaca.- Desde 2014, el defensor Miguel Ángel Peralta Betanzos ha sido perseguido jurídicamente por la familia de la diputada Elisa Zepeda Lagunas, quien lo culpa de haber participado en el homicidio de su hermano y en una tentativa de homicidio. El proceso jurídico que ha tenido que atravesar desde entonces ha sido largo, complicado y plagado de irregularidades, pero este 2025 puede ser definitorio. Actualmente, el Poder Judicial (PJ) en Oaxaca tiene en sus manos cinco posibles resoluciones para la situación jurídica de Miguel, quien es una persona entre las decenas de perseguidxs políticxs por manifestarse y organizarse contra la explotación, el saqueo y el cacicazgo en Eloxochitlán de Flores Magón.
En una entrevista con Sueña Dignidad este 14 de octubre, la abogada Araceli Olivos Portugal (quien acompaña el caso voluntariamente desde junio de 2024) ofreció una cronología del caso de Peralta; además, explicó la importancia de la resolución que, ahora, está en manos de tres magistrados del Primer Tribunal Colegiado en Materias Penal y Trabajo del PJ en Oaxaca.



Los magistrados son Víctor Hugo Cortés Sibaja, Carlos Abel de los Santos Sánchez y Jahaziel Reyes Loaeza (este último, seleccionado en las elecciones del Poder Judicial del pasado mes de junio). Se espera que, en los próximos días, dichos funcionarios analicen el caso de Miguel, el cual inició en 2014 con su detención por las acusaciones de Elisa Zepeda. Sin embargo, fue liberado en 2019 por la falta de pruebas en su contra.
Inconforme con esta sentencia absolutoria, la familia de Elisa Zepeda (quien actualmente se desempeña como diputada local en Oaxaca) presentó una apelación. Como consecuencia de ello, en 2022, una sala penal del Tribunal Superior de Justicia del estado decide revocar la libertad de Miguel y cambiarla por una sentencia de 50 años de prisión.
Un año después, en 2023, el equipo defensor de Miguel Ángel Peralta pidió al Primer Tribunal Colegiado que “lo protegiera en contra de esta sentencia injusta”, narró la abogada Olivos. El Tribunal confirmó que —en efecto— había violaciones procesales en su caso por la falta de careos entre testigos con la parte acusatoria. Sin embargo, su decisión fue que el asunto se devolviera al juzgado de Huautla (el mismo que ordenó el encarcelamiento de Miguel en 2014) para hacer careos.
“Esto [los careos] es bastante ocioso y muy perjudicial, pues son asuntos que terminan tomando muchos años”, explicó Araceli Olivos. Es por eso que Miguel y su defensa presentaron un amparo directo de revisión ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
En noviembre de 2024, la Suprema Corte dio una resolución por medio de la cual le señaló al Primer Tribunal Colegiado que su sentencia había estado equivocada y le regresó el caso. “Y por eso es que otra vez el asunto vuelve a esta instancia”, explica Araceli Olivos. “Este tribunal tiene que volver a dictar una sentencia porque hizo mal su sentencia de 2023”.
En palabras de la defensora jurídica, lo que la SCJN pide al Tribunal es “vuelve a dictar una sentencia sobre esta protección que te está pidiendo Miguel, pero ahora hazlo con perspectiva intercultural. Es decir, tomando en cuenta las especificidades culturales de Eloxochitlán, el derecho de autonomía y libre determinación y el contexto”.
¿Cuál es el panorama de esta revisión del caso? Araceli Olivos prevé cinco posibles escenarios. Sea cual sea el que se determine, marcará una pauta definitoria, pues este recurso jurídico es el último que Miguel puede presentar para su defensa.



Las posibles resoluciones ante el último recurso de Miguel Peralta
Araceli Olivos explica que, en este proceso para llegar a una sentencia nueva, el magistrado Víctor Hugo Cortés Sibaja será quien expondrá una posible resolución con base en una revisión del caso. Luego se votará a favor o en contra, y se tomará la decisión que mejor le parezca a la mayoría (es decir, a dos de los tres magistrados del Primer Tribunal Colegiado antes mencionado).
Es así que gran parte depende de la resolución depende de la propuesta que Víctor Hugo Cortés haga. Analizando las posibilidades, la defensora Olivos Portugal plantea cinco posibles escenarios. El primero de ellos es el más positivo: aquel que anule definitivamente la sentencia de 50 años para Miguel ante la falta de pruebas que lo vinculen con los supuestos delitos cometidos.
La resolución contraria —y la menos deseada— sería que se determine la culpabilidad de Miguel pese a la falta de pruebas en su contra (entre muchas otras irregularidades en el caso) y se reafirme la sentencia de 50 años de prisión.
Otra de las posibles resoluciones es que se dicte una sentencia menor y que, con ello, no reconozca la persecución jurídica contra Peralta Betanzos. La cuarta “no es la peor, pero también es mala”, advierte Olivos: que el Colegiado decida regresar el caso al juzgado de Huautla para que sea esa instancia quien dé la sentencia definitiva.
Esta opción “puede ser por la razón que se les ocurra: otra vez por careos, ahora por falta de intérprete… lo que se les ocurra”, detalla la abogada de Miguel. Y, finalmente, otra posibilidad es que el asunto regrese a la misma sala penal del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca que revocó la libertad del antropólogo en 2022.
“Le diría: oye, tú le quitaste la tú le quitaste la libertad a Miguel, vuelve a dictar una sentencia en la que consideres todo este contexto. Esto sería como si el Primer Colegiado no quisiera entrarle a resolver algo que le corresponde. Por eso no es lo peor que puede pasar, pero sí es algo insuficiente e irresponsable”, asevera Araceli Olivos.




No se tiene una fecha exacta para que la resolución llegue. El asunto se discutirá cuando se ponga en la lista de discusiones del Colegiado, lo que normalmente se determina cada viernes. Mientras tanto, la defensa y la familia de Miguel Peralta permanecen a la expectativa, aunque con la misma esperanza y arrojo, tras haberse reunido con los magistrados el pasado 11 de octubre.
En esta reunión, Víctor Hugo Cortés Sibaja se comprometió a actuar con independencia para presentar su propuesta de sentencia. Por su parte, Carlos de los Santos Sánchez y Jahaziel Reyes Loaeza expresaron sus intenciones de resolver el caso de fondo y dejar de lado los detalles procesales que podrían hacer que el asunto regrese a Huautla.
Realizan jornada cultural por la libertad de Miguel y de todo Eloxochitlán
La reunión entre la familia Peralta Betanzos y los magistrados Víctor Hugo Cortés, Carlos de los Santos y Jahaziel Reyes se llevó a cabo luego de una breve marcha en la avenida de San Bartolo Coyotepec que dirige a “el queso”, como se le conoce coloquialmente al edificio del Poder Judicial de la Federación en Oaxaca.
Una imponente construcción circular de color blanco delata el por qué del apodo. Cerca de las 11 de la mañana de ese viernes, en la entrada de “el queso”, los barrotes grises que rodean la construcción se abrieron —aunque con discreción y refuerzo policial— para recibir a la familia de Miguel y a otras personas más que decidieron acuerparla en este paso en su búsqueda de justicia.
Un funcionario rodeado de tres policías salió recibir a Martha Betanzos Fuentes, madre de Miguel, a su padre Pedro Peralta Carrillo, y a sus hermanos. La reunión duró cerca de 4 o 5 horas. Durante ese tiempo, afuera se realizó una jornada cultural por la exigencia de la libertad absoluta para Miguel Peralta. La convocatoria corrió a cuenta de diversas personas de la comunidad de Eloxochitlán, así como de activistas en Oaxaca que llevan años acuerpando esta lucha por la defensa de dicho territorio y la libertad de sus presos políticos.
La jornada, precisamente, se centró en recordar por qué se lucha. Este mensaje estuvo presente en algunas pegas, en las lonas colocadas sobre los peldaños del Poder Judicial y también en la música. Por medio de ella se hizo una remembranza de otros actos represivos del gobierno oaxaqueño contra las comunidades organizadas, y se cantó por los presos políticos que, como Miguel y su propio padre, han sido criminalizados por luchar contra el despojo en sus tierras.











Luego de un rato, la familia de Miguel y la abogada Araceli salieron por los mismos barrotes grises por los que entraron. En una improvisada rueda de prensa, parada de pie junto a una ofrenda que acompañó toda la jornada, la señora Martha anuncia con el megáfono a unos centímetros de la boca: “Hoy tuvimos la oportunidad de que los tres magistrados escucharan todo el sufrimiento que hemos pasado desde hace más de 10 años. Hay familias que ya tenemos más muchos años con este sufrimiento desde que mi esposo Pedro fue torturado. Y parece que el día de hoy nos han escuchado estos magistrados.”
Por su parte, Araceli Olivos detalló que a estos funcionarios no sólo se les expuso el caso de Miguel, sino el de toda la comunidad de Eloxochitlán: de su hermano David, atacado por Manuel Zepeda (padre de Elisa Zepeda); del saqueo del río Xangá Ndá Ge; de las 56 personas afectadas por las más de 200 órdenes de aprehensión con delitos fabricados reactivadas este 2025.
“No son sólo palabras, son testimonios que son muy válidos también. Son pruebas, y cuando algo es prueba los juzgados, los tribunales están obligados a analizarlo”, sentenció Olivos y llamó a ejercer presión para que haya justicia para una comunidad que ha estado en asedio judicial por más de diez años.
Tras estas palabras, las expresiones culturales continuaron con una obra de teatro en la que se representaron tanto la tortura como la esperanza de la libertad. La jornada concluyó con una rutina circense mixteca, cuyas cantaletas críticas contra el sistema judicial aliviaron la sensación expectante y dolorosa de tener que seguir exigiendo justicia luego de más de una década de impunidad. Y, en medio de este alivio, la risa se convirtió en otra herramienta para la exigencia de verdad y de justicia.









¡Libertad para Miguel Peralta Betanzos!
¡Libertad para Eloxochitlán de Flores Magón!
